¡Sawubona aventureros! Hace unos días di una charla online sobre conservación IN SITU del león africano (La cual os dejo aquí si queréis verla), en ella hablé de muchos temas pero hubo uno del que hablé por encima y quiero contároslo un poco más en profundidad: La mayor reubicación de leones jamás hecha.
Antes que nada debemos ponernos en tema, ésta reubicación o reintroducción se llevó a cabo en el Delta de Zambezi, Mozambique dónde los leones llevaban años extintos en la zona. Esto se debió a la sobre caza que hubo de una de sus principales presas, el búfalo cafre, durante la guerra civil de Mozambique, entre 1977 y 1992.
En 1994, Mark Haldane fundó un equipo anti-furtivos para Zambeze Delta Safaris, algo que fue primordial ya que el declive de animales en la reserva era muy acentuado, y el ecosistema no funcionaba como tal por culpa de la caza furtiva indiscriminada. Tardó 1 año aproximadamente en entrenar y poner a punto su equipo, el cual paró la caza indiscriminada, y con iniciativas de cara a las comunidades locales el ecosistema de la zona empezó a estabilizarse.
Los resultados de las medidas tomadas a principios de los 90´ dieron sus frutos casi dos décadas y medio después cuando las manadas de herbívoros volvieron a prosperar… entonces fue la hora de estabilizar el ecosistema con un gran depredador.
En 2018, conservacionistas, propietarios de tierras, donantes y el gobierno de Mozambique quisieron sacar adelante un plan muy ambicioso, añadir unos ocho mil kilómetros cuadrados a la reserva para volver a tener al majestuoso león en sus tierras, y entonces empezó la reubicación más grande jamás hecha…
Muchos decían que era algo imposible de hacer, demasiados leones sanos y que después deberían ser monitoreados en tierra, no sería ni fácil ni barato. De todos modos, Zambeze Delta Safaris, Cabela Family Foundation y Carter Wildlife Conservation Alliance siguieron adelante con su plan y eligieron 24 leones sanos que les donaron de diferentes reservas de toda Sudáfrica, 18 hembras y 6 machos. Se sedaron y trasladaron a grandes recintos para comprobar su estado de salud, permaneciendo ahí durante 3 semanas. Cuando se corroboró que eran leones sanos, comenzó el peligroso viaje hacia Mozambique…
Una viaje en aeroplano, 2 para ser exactos, que trasladaban 24 leones salvajes sedados. Hablamos de unas 2 horas y 30 minutos donde por seguridad tanto humana como por los leones todo tiene que ser perfecto. Los veterinarios estuvieron pendientes de la salud de los leones en todo momento, y de esta manera llegaron sanos y salvos a Mozambique.
Allí les esperaba la tribu Thozo, ésta tribu tiene la creencia que el espíritu del león es su protector y que al morir se convertirán en espíritus de leones que protegerán a sus descendientes. Aunque al principio no les convencía del todo que el león volviera a vagar por sus tierras finalmente se alegraron de volver a convivir con éste depredador, he hicieron ceremonias de bienvenida para que los nuevos leones sobrevivieran en su nuevo hogar.
Luego de pasar un tiempo más en recintos de aclimatación, donde terminaron de asegurarse que gozaban de buena salud y donde además a 15 de ellos se les colocó collares de rastreo… fueron liberados. Sabían que al ser tantos individuos y tener una gran extensión de tierras solo para ellos, la manada se dividiría, ocupando cada una un trozo de esta nueva reserva que ofrecía tantas oportunidades a estos nuevos ejemplares.
Tan sólo 6 meses después de la reintroducción de estos leones en Zambezi, ya se empezaron a ver resultados… algunas de las hembras habían dado a luz, la naturaleza empezaba a abrirse camino. A día de hoy, aunque algunos de los ejemplares no consiguieron salir adelante (Un riesgo que ya se sabía que existía), las manadas prosperan y poco a poco van aumentando sus números.
Ésta es la historia de 24 leones, pero con ellos también se consiguió que un ecosistema entero se restaurara y prosperara. Con esfuerzo y dedicación podemos conseguir que la naturaleza vuelva a restablecerse y así reparar el daño que hemos hecho a la naturaleza. Tal vez de esta manera volvamos a formar parte de la vida salvaje.
Impilo enh aventureros.
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